El equipo dirigido por Alfredo Arias impuso su experiencia, su lectura táctica y su eficacia para cerrar una serie histórica.
Junior de Barranquilla selló una final perfecta y se consagró campeón de la Liga BetPlay tras derrotar 0-1 a Deportes Tolima en el estadio Manuel Murillo Toro, resultado que cerró un global de 4-0 y confirmó la superioridad del equipo dirigido por Alfredo Arias a lo largo de la serie.
Tolima, urgido por la desventaja de la ida, intentó asumir el protagonismo desde el arranque. Con intensidad y empuje buscó arrinconar a su rival, pero se topó con un Junior bien parado, inteligente para defender y preciso para neutralizar cada intento del conjunto local. La ansiedad del Vinotinto y Oro contrastó con la calma de un Tiburón que nunca perdió el orden.
En el primer tiempo llegó el golpe que terminó de liquidar la final. Junior encontró espacios, aceleró en el momento indicado y convirtió el único gol del partido, una anotación que enfrió el ambiente en las tribunas y dejó sin reacción a Tolima. A partir de ahí, el trámite fue favorable para los visitantes, que manejaron el balón y el reloj con oficio de campeón.
Con el pitazo final, Junior celebró una consagración incuestionable. Ganó en Barranquilla y en Ibagué, fue sólido en defensa, efectivo en ataque y mostró personalidad en los momentos decisivos. Así, el equipo rojiblanco levantó un nuevo trofeo y alcanzó su estrella número 11, reafirmando su lugar entre los grandes del fútbol colombiano.
